Drogas

Adicción

Enfermedad crónica y recurrente del cerebro caracterizada por la búsqueda y el consumo compulsivo (drogas, nuevas tecnologías, juego o compras compulsivas, ejercicio físico extenuante…) a pesar de sus consecuencias nocivas. Se considera una enfermedad del cerebro porque su estructura y funcionamiento se ven afectados.

Alcohol

Tipos de consumos colectivos:

  1. La previa: se trata de adquirir alcohol barato en tiendas, supermercados, gasolineras… y consumirlo, generalmente en grupo, en casa en la calle, en el parking o en espacios previos al acceso a la discoteca, bar musical o equivalente.
  2. El botellón: ESTUDES nos informa de que el 62% de los estudiantes de 14 a 18 años ha hecho botellón en el último año. El porcentaje es similar en chicos y chicas. Esta práctica aumenta con la edad: cuatro de cada 10 jóvenes de 14 y 8 de cada 10 de 18 años han hecho botellón en el último año. Los que hacen botellón también consumen, en mayor porcentaje, otras sustancias como cannabis o cocaína.
  3. Binge Drinking: se trata de consumir 5 o más copas en unas 2 horas. Este es un patrón de consumo similar al de las borracheras. La mitad de los jóvenes de 17 años ha hecho binge drinking al aumentar la edad. El porcentaje de mujeres es mayor que en los hombres, a los 14 y 15 años.
  4. Neknomination: se trata, a través de redes sociales, de realizar apuestas, nominando a 3 amigos para que ellos repitan la proeza de beberse de un trago una consumición alcohólica. Los que superan la apuesta pueden nominar a 3 amigos cada uno. Este fenómeno, que surgió en Australia, se ha convertido en un fenómeno viral y es, en la actualidad, bastante popular entre los jóvenes españoles.
  5. LIVR (Liver): des de los EE.UU. se ha ultimado una red que tiene como único requisito, en el caso de querer formar parte de ella, el grado de intoxicación etílica del candidato. El participante dispone de un alcoholímetro conectado al móvil que sirve para determinar si presenta suficiente nivel de alcohol en sangre para acceder al espacio virtual. Una vez admitido, se pueden realizar bromas, acciones arriesgadas, llamadas telefónicas aleatorias, etc. Se pueden colgar fotografías y/o textos que serán eliminados a la mañana siguiente. La red también ofrece un mapa de locales cercanos donde haya concentraciones de ebrios.
  6. Juegos de borrachera: como la ruleta o el juego de la oca, entre otros, debidamente adaptados a las circunstancias del colectivo específico. Se trata de juegos que facilitan el consumo intensivo, rápido, en grupo, y en contextos de ocio. Estos juegos son muy populares entre los adolescentes y jóvenes.

Cannabis

A mediados del siglo XX se consiguió, por primera vez, aislar el principio activo fundamental del cáñamo: el Delta 9 tetrahidrocannabinol (THC, un compuesto de naturaleza no alcaloide). La planta tiene además unos 60 componentes activos reconocidos.

El THC genera efectos depresores y psicodislépticos sobre el SNC, pero complementariamente a sus propiedades farmacológicas, coexisten también otras variables condicionantes de los efectos de su consumo:

  • La cantidad consumida (dosificación).
  • La calidad de los derivados del cannabis (grado de pureza), que da lugar a distintas concentraciones de excipientes, de principio activo (cannabinoles) y de adulterantes.
  • La vía de administración: aunque la vía más utilizada es la respiratoria (fumados), se usan también por vía oral (en forma de infusiones, pastelillos de marihuana o de hachís).

Respecto a su frecuencia de consumo, se deberá distinguir entre el consumo experimental, ocasional, circunstancial, habitual y adictivo. Los mecanismos de tolerancia y dependencia se desarrollarán y se intensificarán también en función del tipo de frecuencias de consumo.

Uno de cada dos jóvenes y adolescentes de 14 a 19 años escolarizados de Cataluña manifiesta que consume o ha consumido cannabis. Una parte de ellos, mayoritariamente los que hayan realizado un consumo experimental, ocasional o circunstancial, raramente presentarán trastornos derivados. Otros se convertirán en adictos y deberán ser tratados para ello.

Cocaína

El producto que llega habitualmente al consumidor es hidrocloruro de cocaína. Su riqueza es variable, pero suele ser alta, entre el 45 i el 65% en la mayoría de las provincias españolas. Se presenta en forma de polvo y se administra mayoritariamente por vía inhalatoria, aunque también es frecuente la vía pulmonar (fumada) y la vía intravenosa. Entre los efectos derivados del consumo de cocaína encontramos: inhibición de la recaptación de catecolaminas y serotonina con lo que aumentan las concentraciones de estos neurotransmisores. Inhibe también la recaptación de noradrenalina, lo que da lugar a efectos tóxicos asociados a la hiperactividad simpática (hipertensión, cardiotoxicidad, etc.), y potencia respuestas dopaminérgicas centrales, este último es el mecanismo más relevante en el desarrollo de su potencial adictivo.

Consumo de drogas (tipología)

  • Consumo de uso: genéricamente se aplica cuando se trata de un consumo puntual, esporádico y de poca cantidad.
  • Consumo de abuso: se refiere a dosis altas, generalmente autoadministradas en determinadas frecuencias de tiempo y contextos (por ejemplo, fines de semana o festivos) o en determinadas circunstancias del consumidor (embarazo, enfermedad…).
  • Consumo de inicio: se refiere a la primera o primeras sustancias consumidas o a la sustancia motivo de demanda asistencial.
  • Consumo de escalada (escala): referido al cambio o evolución, y no necesariamente al abandono, que el consumidor experimenta desde el consumo inicial de aquellas sustancias más cercanas (legales, sociales) hacia otro tipo de sustancias.
  • Consumo público: se refiere al consumo de drogas legales y / o ilegales tanto en espacios autorizados como no. En el caso de éstos puede dar lugar a conflictos administrativos o legales (por ejemplo, sanciones administrativas por consumo en vía pública).
  • Consumo privado: se refiere al consumo de drogas legales y/o ilegales realizados en recintos particulares con diferentes niveles de regularización.
  • Consumo en solitario: se refiere al consumo individual en espacios públicos o privados.
  • Consumo grupal: se refiere al consumo de dos o más componentes en espacios públicos o privados, y pueden llegar a ser masivos.
  • Consumo de género: genéricamente se refiere a los tipos de sustancias consumidas más prevalentes en función del sexo.
  • Consumo cultural / social: tradicionalmente relacionado con determinadas sustancias, sus usos y costumbres por un grupo humano o sociedad específica.
  • Consumo ilegal / ilícito: relacionado con las sustancias cuya venta libre está prohibida y penalizada.
  • Consumo recreativo: aunque suele relacionarse con el consumo de sustancias aparentemente menos nocivas, suele aplicarse también para describir otras variables del contexto grupal, incluso masivo, que se realiza en espacios de ocio identificados como de tiempo libre o de diversión.
  • Consumo normalizado: se trata de un consumo social entre tolerado, aceptado y, en ocasiones, legalmente regulado, que se produce pública y privadamente en espacios cotidianos.
  • Consumo problemático: se refiere a consumidores de alto riesgo por el tipo de drogas, vías de administración, frecuencia de consumo, policonsumo, trastorno psiquiátrico asociado, patología dual…
  • Consumo adictivo: mecanismo psicológico, y en algunos casos físico, por el cual se adquiere una predisposición a repetir el uso de una sustancia psicoactiva en proporción superior a la anterior. Pérdida de libertad de decisión de administrar una sustancia.
  • Consumo compulsivo: genéricamente se usa como un sinónimo del consumo adictivo, aunque puede aplicarse para describir, en un determinado contexto, la alta frecuencia en la autoadministración de una/s sustancia/s.
  • Consumo agudo: se usa genéricamente asociado al efecto de una determinada sustancia consumida, a la cantidad y pureza autoadministrada, y a las características individuales del consumidor. El consumo agudo suele ser la antesala de una sobredosis o de un coma inducido.
  • Consumo de sustitución: se refiere genéricamente a la/s sustancia/s requeridas, autoadministradas o prescritas como equivalentes de las drogas a las que se habrá desarrollado un consumo de abuso, problemático o dependiente.
  • Consumo de riesgo: suele estar vinculado al tipo de sustancia, a la frecuencia de su administración, la vía de administración, las características individuales del consumidor (peso, edad, embarazo, enfermedad, trastorno psiquiátrico…), pero también por el contexto ambiental donde se realiza el consumo (en la conducción de vehículos de motor, en la práctica de deportes de riesgo, etc.).
  • Consumo crónico: consumo prolongado en el tiempo que comporta, genéricamente, trastornos biopsicosociales, incluso legales, en función de la sustancia consumida, la frecuencia y la vía de administración.

Craving

Tener muchas ganas de consumir. Intensa urgencia para el consumo de la sustancia durante la abstinencia, un deseo irracional o conciencia subjetiva de compulsión, entendido como una necesidad imperiosa, implicando un conflicto entre querer consumir y la abstinencia.

Dependencia

Consiste en la pérdida de la libertad de decisión de tomar una droga, o de realizar una actividad de forma compulsiva. Se distingue entre la dependencia física, psicológica y social.

Dependencia física

Estado de adaptación del organismo que necesita un determinado nivel de presencia de la droga para funcionar normalmente.

Dependencia psicológica

Estado de adaptación que impulsa a la persona a consumir una nueva dosis para experimentar los efectos de placer y evitar el malestar derivado de la privación. Se trata de un estado vivencial que lleva a la persona a creer que se relacionará mejor con los demás y consigo misma si consume droga.

Dependencia social

Necesidad de consumir una droga como manifestación de pertenencia a un grupo social que proporciona signos de identidad a la persona dependiente.

Droga

Se considera droga cualquier sustancia que, administrada a un organismo vivo, es capaz de originar una dependencia, provocar cambios en la conducta y producir efectos perniciosos para la salud.

Drogas de síntesis (o de diseño)

Son sustancias estimulantes del sistema nervioso central que se sintetizan sin control sanitario. Se presentan en forma de comprimidos. Tienen formas, colores e iconos diferentes con multitud de nombres que cambian según la moda y los criterios del mercado ilegal. El principio activo más extendido es el MDMA (3-4-metilendioximetanfetamina). A las drogas de síntesis se les atribuyen 2 propiedades: la entactógena (sensación de aumento de la propia sensibilidad, auto percepción) y la empatógena (sensación de aumento de la comunicación social).

También conocidas como pastillas (o “pastis”, en argot juvenil), son muy atractivas, baratas y fáciles de conseguir. Esta población tiene poca percepción de riesgo derivado de su consumo. Preguntados 2.155 adolescentes y jóvenes que habían visitado la exposición preventiva itinerante “A toda Pastilla” respecto, entre otros, de los motivos de su uso, observamos que las variables curiosidad (fascinación por experimentar nuevas sensaciones), desinhibición (facilidad para comunicarse), fiesta (disfrute con menos cansancio), consumo generalizado (influencia de amigos, moda…) eran las respuestas mayoritarias. A su vez, la percepción generalizada de ser drogas seguras (no adictivas), de utilizarse, básicamente, por vía oral y en contextos recreativos y la escasa repercusión sanitaria contribuyeron a su popularización.

Ketamina

Es un agente anestésico no volátil que se sintetizó en 1962. En 1965 los laboratorios Parke & Davis comercializaron la Ketamina como anestésico con los nombres de ketal, de ketal y Ketina para uso humano y de Ketase para uso veterinario. La ketamina se presenta como un líquido translúcido y es un derivado liposoluble de la fenciclidina (PCP).

La Ketamina se usa clínicamente como anestésico general, es considerado un anestésico leproso, ya menudo se utilizaba en pediatría y en geriatría.

En el mercado ilícito, la Ketamina puede presentarse de muchas maneras: líquido incoloro, polvo blanco (cristales blancos), comprimidos o cápsulas, esto hace que sea posible utilizarla para varias vías de administración: intravenosa, intramuscular (líquida), rectal (líquida), nasal (polvo), pulmonar «ahumada» (polvo) y oral (líquida, comprimidos y cápsulas).

MDMA o éxtasis

Droga ilegal que actúa tanto como estimulante así como psicodélico, produciendo un efecto vigorizante, además de distorsiones en el tiempo y la percepción, y la derivación de mayor placer de las experiencias táctiles. Típicamente, la MDMA (acrónimo de su nombre químico 3,4-metilenedioximetanfetamina) se toma por vía oral, generalmente en forma de pastilla o cápsula, y sus efectos duran aproximadamente de 3 a 6 horas.

Metanfetamina

Es un potente estimulante del sistema nervioso central. Su nombre científico es desoxiefedrina y pertenece a la familia de las fenetilaminas. Se le conoce coloquialmente como Meth, Ice, Crank. Sus efectos principales son la sensación de energía y euforia, con incremento en el nivel de alerta y rendimiento intelectual, disminución de la necesidad de dormir y comer y dilatación pupilar.

“Miau Miau” o Mefedrona (metilcatinona)

Sustancia perteneciente a las feniletilaminas, propiofenonas, con efectos estimulantes y anorexígenos.

Patología dual

La concurrencia en un mismo paciente de dos o más trastornos psiquiátricos es conocida como diagnóstico dual o patología dual (PD). El término es una analogía de la comorbilidad diagnóstica resultante a partir de la coexistencia de un trastorno mental y un trastorno por uso de sustancias (TUS).

Policonsumo

Consumo simultáneo o de forma alterna de diversas sustancias psicoactivas.

Salvia (Salvia divinorum)

Se trata de un alucinógeno, de origen mexicano, con efectos parecidos al LSD.

Setas mágicas (alucinógenos)

Se suelen tomar ingeridos o mezclados con algún alimento, suelen ser de origen natural pero también las hay sintéticas como el Nexus o las legal highs, que gracias a pequeños cambios químicos de elaboración consiguen evadir el control normativo.

Síndrome de abstinencia

Conjunto de signos y síntomas de malestar de carácter físico y psíquico que aparecen cuando, de repente, se interrumpe la administración de una droga (o una práctica de juego o compra compulsivos, de abuso de nuevas tecnologías, de ejercicio físico extenuante…) a la cual la persona ha desarrollado dependencia.

Speed

Sulfato de anfetamina (sustancia sintética perteneciente a la familia de las fenetilaminas), mezclado con diluentes como glucosa, sacarosa, manitol, celulosa… (En algunos países se conoce a la metanfetamina con el nombre de Speed, de aquí puede venir a veces la confusión con el sulfato de anfetamina.)

Sus principales efectos son sensación de bienestar, incremento en el nivel de alerta y en la capacidad de concentración, disminución de las sensaciones de cansancio, sueño y hambre, y dilatación pupilar.

“Spice” o marihuana sintética

Son cannabinoides sintéticos. La vía de administración más usada es la fumada, pero también se prepara como infusión para vía oral.

THC

Se trata de un compuesto de naturaleza no alcaloide, principio activo fundamental del cáñamo (delta-9-tetrahidrocannabinol).

Tolerancia

Referido a las drogas, proceso físico y psicológico que hace necesario conseguir aumentar las dosis de una sustancia de forma progresiva para conseguir los mismos efectos.